La película dirigida por Tom Hooper ganó un Óscar a la mejor película en el año 2010. Nos narra una historia de superación sobre el aspirante al trono británico Jorge VI (representado por el actor Colin Firth), el cuál, en un contexto de falta de liderazgo, padecía tartamudez (disfemia) y esto le suponía un problema a la hora de comunicarse con la ciudadanía y proyectar una imagen de autoridad. 

Gracias a esta película se ayudo a visibilizar la figura del logopeda, en la figura real de Lionel Logue (actor Geoffrey Rush), un terapeuta australiano que ayudó al rey a superar su problema y además a recuperar su autoestima para liderar el país. Pero la ayuda no solo fue de el, si no también del propio aspirante que puso de su parte y confió en la figura y los métodos del profesional.   

“Tiene una aguda tensión nerviosa que fue causada por el defecto. Tiene una disposición nerviosa… Contrae los dientes y las muelas, y mecánicamente cierra la garganta… un hábito extraordinario de recortar pequeñas palabras – a, en – y diciendo la primera sílaba de una palabra y la última sílaba de otra” escribió Logue en algunas de las cartas de entonces. 

La tartamudez es un trastorno del habla, permanente o circunstancial, que se caracteriza por las repeticiones e interrupciones involuntarias en la emisión de palabras y puede ir acompañado de diversos movimientos del rostro y alteraciones respiratorias. La repetición se puede producir en la palabra por completo o solo en alguna parte, además de prolongaciones en los sonidos o interjecciones de éstos como “mmm”, “eh”.

Muchos especialistas ponen hincapié en el comportamiento, enseñándoles a controlar el ritmo al que hablan y a disminuir la tensión física, así como también a controlar la respiración; esto a base de insistencia ayuda al paciente a obtener una mejor expresión en cuanto a facilidad y rapidez. 

Según afirman algunas de las cartas escritas por Lionel, y leídas años más tarde por su nieto, el discurso que tuvo que narrar el aspirante al trono, el principal de la película, contiene notas escritas a mano con lápiz, indicando palabras a recalcar y dónde realizar pausas. 

A raíz de esta película la población pudo conocer en mayor medida las funciones que hace un logopeda y cómo puede ayudar a tratar ciertos problemas, además de visualizarse la práctica en la utilidad de la terapia hacia todos los espectadores. ¡¡Os recomendamos verla!!